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Entrevista a Missy Wallace, Vicepresidenta y Directora Ejecutiva de Iniciativa Global de Fe & Trabajo City to City, realizada por Caroline Cruz para Institute for Faith, work and Economics (2019) https://tifwe.org/missy-wallace-interview/
El Instituto ministra a los profesionales proporcionándoles recursos para integrar su fe y su trabajo. Con una rica experiencia en el mercado, Wallace tiene un corazón para el florecimiento del evangelio. Hoy, comparte algunas de sus ideas sobre el tema de la fe y el trabajo y por qué le apasiona tanto su integración en la iglesia.
"¿Cómo la motiva su comprensión del Evangelio al comenzar el Instituto de Fe y Trabajo de Nashville?
Honestamente, Dios me motivó de una manera inusualmente clara. Estaba en una clase de Biblia a nivel de maestría escribiendo un plan para lanzar un esfuerzo ministerial de un tipo ligeramente diferente cuando leí el libro Every Good Endeavor (Toda buena obra) de Tim Keller y Katherine Alsdorf . No me dio un codazo, sino que me golpeó al darme cuenta de que Dios me estaba llamando a enfocar mis esfuerzos en la fe y el trabajo. La parte hermosa es que mi presencia en esa clase fue el resultado directo de un momento doloroso en mi vida personal al ver a un niño luchar a través de una gran y larga enfermedad. Dios es tan misericordioso en la forma en que conecta la bondad con el sufrimiento si prestamos atención.
Entender el Evangelio no como una historia de salvación individual, sino como parte de la historia completa de Dios para redimir a toda la creación, ha sido crucial para ayudarme a comunicar la necesidad de la integración de la fe y el trabajo. Por supuesto, a todos nos resulta difícil integrar nuestra fe y trabajar, en parte debido a nuestra naturaleza pecaminosa y desordenada. Al verme en el espejo todos los días y al identificar mis propios ídolos falsos en mi trabajo, he aprendido la importancia de este mensaje y lo perdida que estoy sin él. Porque lo que todos queremos es que “venga tu reino a la tierra como en el cielo”, ¿verdad?
Ha vivido en todo el mundo: desde Chicago a Nueva York y de Singapur a Bangkok. ¿Cómo ha moldeado esta experiencia internacional su visión del Nashville Institute for Faith & Work?
Esa es una buena pregunta. No estoy segura de saber cómo el trabajo internacional moldeó directamente la visión de nuestro Instituto, pero ciertamente puedo comentar sobre su influencia indirecta. Mientras trabajaba en numerosos países, a veces formaba parte de equipos con personas de hasta diez países y de tres o cuatro religiones. En retrospectiva, veo un gran patrón: el anhelo de significado en el trabajo de uno es universal, no estadounidense, no cristiano, y no está limitado por una clase socioeconómica. En consecuencia, el trabajo está roto y, a menudo, buscamos identidades en el trabajo. Nuestro Instituto abordará cada uno de estos problemas equipando, conectando y movilizando a los habitantes de Nashville para que integren su fe y su trabajo de manera más fluida con fundamentos teológicamente sólidos.
El año pasado asistí a un seminario sobre el lanzamiento de esfuerzos de fe y trabajo, y me inspiré al participar con líderes de los cinco continentes. Dios está conmoviendo corazones en todo el mundo sobre este tema, ya que están surgiendo iniciativas similares a las nuestras en todo el mundo.
¿Qué desafíos anticipa en los próximos meses mientras trabaja para construir el Instituto?
Espero que la mano de obra y los recursos financieros sean desafíos. Pero eso será parte de la diversión. Somos bendecidos con el liderazgo y el apoyo de un pastor visionario que entiende este concepto y está motivado para dar a luz algo magnífico.
Otro desafío importante será priorizar por dónde empezar. Queremos equipar a las personas, conectarlas entre sí y movilizarlas para hacer cambios por el bien de Nashville y más allá. Esas son metas elevadas. Comenzaremos con un plan de estudios de liderazgo de un año, algunas series de oradores y quizás una competencia de planes de negocios bien financiados. El esfuerzo será decididamente cristiano pero intencionadamente ecuménico. Puede ser difícil alentar la participación de muchas iglesias, pero queremos que esto sea para todo Nashville, no solo para nuestra congregación y su red.
Cuando miro nuestro contexto particular de Nashville, puedo imaginarme que los tiempos de viaje suburbano y la ajetreada vida familiar dificultarán que algunas partes interesadas se involucren plenamente. Confío en que Dios pondrá a las personas adecuadas en nuestro camino para hacer una diferencia en la vida de muchos. Espero el efecto dominó.
Aquí en IFWE, hablamos mucho sobre la falsa división sagrada / secular en la iglesia. Podemos adorar a Dios tanto el lunes por la mañana como el domingo por la mañana. Sé que esto es algo que también has considerado. ¿Por qué crees que es tan importante que la iglesia lo comprenda?
Estaba hablando con uno de los miembros de mi iglesia sobre este concepto y me dijo: "No quiero ser grosero, pero ¿por qué centrarme en la fe y el trabajo? Esto no es nada especial; es vivir la vida como discípulo. Es lo que deberíamos hacer todos los días." Y la verdad es que tiene razón.
Este no es un mensaje nuevo radical o uno que la iglesia no comprende. Pero es uno que la iglesia puede no comunicar bien a los feligreses. Escrita en el siglo XIX, la siguiente cita de la reconocida ensayista británica Dorothy Sayers sigue siendo válida en la actualidad: "En nada la Iglesia ha perdido tanto su agarre a la realidad como en su falta de comprensión y respeto de la vocación secular. Ha permitido que el trabajo y la religión se conviertan en departamentos separados, y se sorprende al descubrir que, como resultado, el trabajo secular del mundo se convierte en fines puramente egoístas y destructivos, y que la mayor parte de los trabajadores inteligentes del mundo se han vuelto irreligiosos. , o al menos, desinteresado en la religión."
El estadounidense promedio pasará más de 80.000 horas en el trabajo durante su vida. Algunos adoran el trabajo mientras que otros lo deploran; algunos lo ven solo como una fuente de ingresos, mientras que otros lo ven como una fuente de autodefinición y glorificación. Comprender y aceptar que todo buen trabajo, no solo el trabajo ministerial, le importa a Dios es fundamental para unirse a él en su plan redentor para este mundo.
¿Cuáles son sus esperanzas para los próximos años? ¿Cómo ve la ciudad de Nashville transformada por una comprensión bíblica de la fe y el trabajo?
Mi primera esperanza es que podamos cambiar fundamentalmente el defecto teológico que muchos tienen en torno a su trabajo. Con frecuencia hablo con personas que ven su trabajo secular como menor que el de un ministro o misionero, o incluso un médico o un educador. O están perdidos en su trabajo, definiendo su valor por él. Si podemos tener un cambio radical en la forma en que todos y cada uno de los cristianos comienzan a ver su trabajo, es posible que tengamos más oportunidades de renovación cultural en nuestra ciudad. Si todo cristiano pudiera ver todo el trabajo como algo importante para Dios y como parte del papel de cada persona en el desarrollo de la historia de Dios, imagínese los cambios podrían suceder con el tiempo. Y no me refiero a la evangelización, aunque es un fruto probable. Me refiero a promotores inmobiliarios que se ocupan de familias desplazadas por su gentrificación. Me refiero a los diseñadores de moda y los medios de comunicación que honran el verdadero físico femenino. Realmente, las oportunidades son infinitas; mi imaginación es demasiado pequeña para lo que pueda pasar. Pero mi primera esperanza es que equipemos a una legión de líderes cristianos con el punto de vista de que Dios se preocupa profundamente por su trabajo y que su trabajo es importante.